domingo, 10 de noviembre de 2013

GIBRALTAR Y MADRID 2020, DOS FRACASOS DEL PP (9-9-2013)



Hemos pasado el verano con el culebrón de Gibraltar, por una absurda rabieta del Gobierno del PP, obsesionado con este tema, incapaz de admitir que así no se recupera ese territorio. Ni se consigue por medios bélicos, Argentina ya fracasó hace treinta años con unas islas de tamaño mucho más grande, y se encontró además con toda Europa solidarizándose con Gran Bretaña, por aquello de que Argentina tenía una dictadura genocida que asesinaba a sus disidentes. Una discutible decisión del Gobierno gibraltareño ha exacerbado al PP, deseoso de encontrar cortinas de humo con las que hacer olvidar a los ciudadanos la corrupción que asola a ese partido político, sobre todo con el caso Bárcenas, desde hace tres meses en la cárcel, pero que surgen detalles sórdidos continuamente del caso poco conocidos. Y los “patriotas” que he escuchado, no han sido precisamente gente del siglo XXI, educadas, tolerantes. Un jefe de la asociación de pescadores en las aguas gibraltareñas, gente humilde, eso sí, pero con un representante mal educado, ignorante y que habla con vocabulario tabernero de la Edad Media (por decirlo suavemente). Un Ministro de Asuntos Exteriores obsesionado con Gibraltar de manera paranoica. Por no hablar de una Prensa conservadora que si pudiera, haría “limpieza étnica” en el Peñón. No me refiero a exterminar a los gibraltareños, claro, sino “sustituirlos” por españoles “puros”. Pero eso no puede hacerlo, sería racismo. Y la otra gran baza que tenía el PP, la Olimpiada de 2020 para Madrid, también ha fracasado. Aun se oyen voces que llaman corruptos al COI y a sus miembros. En eso me quiero detener: por favor, si eso ya se sabía, parece que hayan descubierto la rueda, pero la gente del COI no se deja engañar ni deslumbrar. No se paran a hacer autocrítica, a reflexionar por qué un proyecto que había ilusionado a la gente se diseñó muy mal, con poco presupuesto, un Ayuntamiento (el de Madrid) endeudado hasta las cejas, pocas ganas de luchar contra el dopaje y una surrealista presentación de la alcaldesa Ana Botella, con un pésimo nivel de inglés que hace experto en la lengua de Shakespeare al mismísmo Pedro Almodóvar, a quien atacaban por decir, cuando ganó el Óscar el año 2000, “And the Virgin of La Cabeza and Jesús de Medinaceli”(aunque Pedro sí domina el inglés). Un chiste que leí en Twitter así lo resumía: “Ana Botella, díganos cómo se dice ‘mirar’ en inglés”. Ella contesta: “Look”. Le dicen: “Muy bien. ¿Podría construir una frase con la palabra ‘look’?” Y ella contesta: “Look, yo soy tu padre”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario